El 24 de agosto de 2025, en la Región de Antofagasta, Chile, las patrullas de Carabineros hallaron dos camionetas enterradas parcialmente en la nieve, cerca de la ruta CH-27, muy próxima a la frontera con Bolivia, en una zona cercana al Parque Nacional Abaroa.
- En uno de los vehículos, registrado aparentemente a nombre de la Policía boliviana, se encontraron casi 500 kilos de marihuana y 70 kilos de pasta base de cocaína.
- En el otro vehículo se hallaron armas de guerra, pistolas y municiones.
Cinco de los ocupantes de esos vehículos resultaron ser policías bolivianos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), mientras que el sexto era un civil que conducía una camioneta con placa chilena falsificada y reporte de robo. Todos fueron detenidos y trasladados a la ciudad chilena de Calama.
Evidencias y mensajes reveladores:
Durante la audiencia en el Juzgado de Garantía de Calama, el fiscal Claudio Rojas leyó en voz alta mensajes de WhatsApp recuperados de los celulares incautados a los detenidos. Estos mensajes evidencian un lenguaje en clave utilizado por los policías para referirse a drogas (“lechugas” para marihuana) y al dinero producto del narcotráfico.
Frases como:
- “Todo estaba jodido, jodido. Ayer he hecho pasar y hoy ya se la han llevado. Así que en estos días ya voy a tener el efectivo, compa. No te preocupes.”
- “Hay que seguir trabajando internamente no más, tranquilamente, sin que alguien se dé cuenta. Capaz a alguien le han dicho que has llevado lechugas en cantidad…”
Estas comunicaciones derrumban la versión oficial de los policías, quienes alegaban que habían cruzado a Chile accidentalmente en medio de una persecución a contrabandistas y que repelieron disparos sin darse cuenta de haber pasado la frontera.
El juez Sergio Rojas destacó la importancia de esas pruebas para entender las intenciones de los policías al ingresar a territorio chileno.
Posición del Gobierno boliviano y acciones legales:
El Gobierno de Bolivia asegura que los policías cruzaron «sin dolo» y en el marco de sus funciones oficiales, en una persecución a contrabandistas, negando cualquier intención ilícita. Anunció que la Cancillería boliviana está gestionando el retorno de los uniformados.
Sin embargo, en Chile, la Fiscalía formalizó a los policías por tráfico de drogas, tenencia ilegal de armas prohibidas, municiones y disparos injustificados. El civil fue formalizado por tráfico de drogas y receptación de vehículo robado. Los seis fueron enviados a la cárcel de Antofagasta por 150 días mientras dura la investigación.
Durante la investigación, se incautaron 14 celulares que fueron desbloqueados judicialmente para obtener más pruebas, y se espera que continúen apareciendo evidencias para esclarecer la red delictiva relacionada.
Reacciones y contexto regional:
- El viceministro boliviano de Sustancias Controladas defendió a los policías, reiterando su labor de interdicción contra el narcotráfico.
- En contraste, autoridades chilenas, como el diputado Sebastián Videla, consideraron que la posesión de droga, armas y vehículos robados por parte de los policías bolivianos es un hecho grave, y anunció iniciativas para cerrar pasos fronterizos ilegales usados para actividades ilícitas.
- Videla también afirmó que semanalmente al menos 30 vehículos son robados en Antofagasta para ser trasladados a Bolivia por pasos no autorizados, en una frontera que cuenta con seis pasos legales en 942 kilómetros.